En plena época de cambios sociales, cada vez son más los profesionales que deciden emprender el vuelo en solitario entrando en la parcela del autónomo o freelance. En esta aventura, que no siempre es sencilla ni agradable; tienen mucho que decir los espacios de coworking: Grandes centros gestionados por gente encantadora que orientan a sus nuevos “pupilos”, que les dan cobijo y que les hacen sentir como un casa.